¿Cómo evitar la contaminación del aire en interiores?
01.06.2022
La mayoría de las personas son conscientes del efecto que la contaminación del aire exterior puede tener sobre nuestra salud, pudiendo causar problemas en los pulmones, la nariz, la garganta y los ojos, así como agravar enfermedades preexistentes como el asma o las cardiopatías. Pero no es sólo la contaminación del tráfico en el exterior que puede causar problemas. También debemos ser conscientes de la calidad del aire interior de nuestro hogar y lugar de trabajo.
Hay muchas cosas que hacemos a diario que pueden provocar la contaminación del aire interior. Sin embargo, hay algunas medidas que podemos tomar para minimizar la contaminación en el interior y mejorar la calidad del aire interior.
Causas de la contaminación del aire en interiores
Hay todo tipo de cosas que pueden afectar negativamente la calidad del aire en tu casa o lugar de trabajo. Esto incluye las cosas de la cocina, como las cocinas de gas. Incluso cocinar puede ser contaminante, ya que libera humo y olores en el aire. Las partículas de polvo y la caspa de los animales domésticos también pueden reducir la calidad del aire en tu casa y causar problemas de respiración e irritación de los ojos, la nariz y la garganta.
Los productos que utilizas para limpiar pueden provocar la contaminación del aire interior, ya que algunas sustancias químicas son perjudiciales si se respiran en exceso. Las velas, el incienso y los fuegos de leña pueden liberar partículas en el aire que pueden reducir la calidad del aire e irritar tu sistema respiratorio. La humedad y el moho también pueden causar un problema de contaminación del aire y provocar problemas respiratorios.
El contaminante potencial más grave del aire interior es el monóxido de carbono, que puede ser mortal si no se detecta. Se trata de un gas venenoso que no tiene olor ni sabor: el primer síntoma que puedes notar si tienes una intoxicación por monóxido de carbono es un dolor de cabeza y otros síntomas parecidos a los de la gripe que no van acompañados de fiebre. Las fugas de monóxido de carbono son poco frecuentes, pero pueden producirse cuando los aparatos de calefacción y cocina no se revisan con regularidad. Se aconseja tener una alarma de monóxido de carbono en las habitaciones en las que se quema combustible, para que se te avise en caso de fuga.
Cómo reducir la contaminación del aire en interiores
Utiliza un purificador de aire
Un purificador de aire es una forma eficaz de mejorar la calidad del aire en una habitación. El purificador de aire adecuado reducirá activamente los alérgenos y las partículas contaminantes del aire, ayudándote a respirar mejor y a reducir los problemas de salud asociados a la mala calidad del aire.
Nuestros purificadores de aire TruSens utilizan una filtración de 360 grados para capturar y destruir contaminantes comunes como alérgenos, gases COV y partículas ultrafinas. La luz ultravioleta destruye todos los gérmenes y virus que se acumulan en el filtro y luego hace circular el aire limpio y fresco hacia la habitación. Disponemos de tres sistemas de filtración especializados en función de lo que necesites para mejorar la calidad del aire interior de tu hogar:
- El filtro antiviral para alergias y gripe aumentará la protección contra la gripe, el coronavirus y todo tipo de alergias, incluida la fiebre del heno, al capturar y eliminar los gérmenes y las bacterias.
- El filtro de olores ayudará a combatir los olores de la limpieza y de la cocina, así como a reducir los COV en el aire, como el amoníaco y el formaldehído
- El filtro para mascotas se centra específicamente en la caspa, el pelo y los olores de las mascotas, eliminándolos del aire.
Todos nuestros filtros HEPA cumplen la norma HEPA, lo que significa que eliminan el 99,97% de las partículas contaminantes del aire, incluso las de tan solo 0,3 micras.
Si se combina con el monitor de calidad del aire interior SensorPod, que controla y comprueba la calidad del aire en toda la habitación, nuestros purificadores de aire te ayudarán a mejorar la calidad del aire interior y a seguir respirando aire limpio.
Abrir las ventanas
Abrir las ventanas puede ser una buena manera de introducir aire fresco en tu casa y hacer circular el aire contaminado. Esto puede ser especialmente útil si has estado utilizando productos de limpieza químicos fuertes, pintando o cocinando. También puede ayudar en los meses de invierno a reducir el riesgo de contaminantes causados por la humedad y el moho. Aumentar la circulación del aire ayudará a eliminar las partículas nocivas.
Sin embargo, tendrás que ser estratégico en cuanto a cuándo abrir las ventanas. Por ejemplo, si vives cerca de una carretera con mucho tráfico, es posible que quieras evitar abrir las ventanas en los momentos en los que hay mucho tráfico. Si tienes alergia al polen, es conveniente que evites abrir las ventanas durante la temporada de alergias, especialmente por la mañana y por la noche, cuando el recuento de polen es mayor. En este caso, un purificador de aire será la mejor opción para hacer circular el aire en tu casa sin dejar entrar más contaminantes.
No fumes dentro de casa
Cuando fumas un cigarrillo, la mayor parte del humo sale al aire que te rodea, y no a tus pulmones. Según el NHS, este humo ajeno contiene más de 4.000 toxinas, irritantes y otras sustancias que pueden causar cáncer. Si se fuma en el interior, este humo puede permanecer en una habitación durante unas dos o tres horas, incluso si se abre una ventana para intentar despejarla. El humo también puede extenderse a otras zonas del interior de tu casa, así como filtrarse en los tejidos y otros muebles blandos para salir posteriormente, a veces con efectos perjudiciales.
Si tú o alguien con quien vives fuma, debe hacerlo sólo en el exterior. Incluso podrías guardar el abrigo o la chaqueta que te pones fuera para fumar en un armario aparte, ya que las partículas de humo contaminantes llegarán desde el exterior.
Realizar el mantenimiento de los aparatos de gas
Para evitar el riesgo de fugas de monóxido de carbono, debes hacer que un técnico de gas cualificado revise todos los aparatos de gas y compruebe su seguridad cada año. Podrán identificar cualquier peligro potencial relacionado con el monóxido de carbono u otras fugas de gas y repararlas antes de que se conviertan en un problema.
Utilizar extractores
Cocinar no sólo crea olores, sino que también libera humedad, humo y grasa en el aire y en las superficies cercanas. Para mejorar la calidad del aire interior en tu cocina, debes utilizar siempre la campana extractora o el extractor para eliminar el aire contaminado. Si tienes una campana extractora de recirculación, debes procurar limpiar los filtros con regularidad para garantizar que el aire limpio pueda recircular en la habitación.
También debes asegurarte de utilizar siempre un extractor en el baño para extraer el aire húmedo y evitar la acumulación de humedad y el moho. Un extractor en el cuarto de baño también puede ser útil cuando se limpia, para eliminar los contaminantes químicos y los olores. Si no dispones de un extractor de aire en tu baño, deberías abrir una ventana para ayudar a despejar el aire.
Aspirar y quitar el polvo regularmente
Una limpieza regular ayudará a reducir la contaminación del aire interior. Al quitar el polvo, se eliminan las partículas de polvo, pero hay que asegurarse de utilizar un paño de microfibra, ya que éste recogerá el polvo en lugar de empujarlo al aire como podría hacer un plumero de tela. También debes pasar la aspiradora con regularidad, sobre todo si tienes mascotas y especialmente si tienes alfombras. Las alfombras albergan más contaminantes y partículas que los suelos sólidos, por lo que es importante aspirar a menudo para eliminarlas y evitar que se dispersen en el aire.
Los animales domésticos, como los perros y los gatos, mudan regularmente su pelo y la caspa de las mascotas aumenta la contaminación del aire. Si tienes mascotas, lo mejor es utilizar más de un método para mejorar la calidad del aire interior. Aspirar regularmente ayudará a reducir lo que acaba en el suelo, evitando que se recircule en el aire. Un purificador de aire funcionará mejor para eliminar lo que ya está en el aire y evitar que llegue a las superficies.
Eliminar la humedad y el moho
Hay que estar atento a las zonas de humedad y acumulación de moho en una habitación, ya que las esporas pueden causar problemas respiratorios. Si ves una mancha de moho, utiliza un eliminador de moho para deshacerte de ella. La mayoría de los eliminadores de moho utilizan productos químicos fuertes para matar las esporas, por lo que siempre debes mantener la habitación bien ventilada cuando utilices estos productos para evitar una mayor contaminación.
Para evitar que la humedad se acumule en primer lugar, debes hacer lo posible por reducir la humedad en tu casa. Si es posible, seca siempre la ropa al aire libre. Si esto no es posible, utiliza un tendedero en lugar de colgar la ropa directamente en el radiador, ya que esto puede causar más condensación. Abre la ventana para ayudar a que circule el aire húmedo, o mantén las ventanas cerradas y utiliza un deshumidificador. Un deshumidificador también puede utilizarse en otras zonas de la casa en las que notes que empieza a acumularse la humedad.
Utiliza productos de limpieza menos contaminantes
Las sustancias químicas utilizadas en algunos productos de limpieza pueden causar irritación en el sistema respiratorio, especialmente cuando se utilizan mediante sprays o aerosoles que pueden distribuir más partículas contaminantes en el aire. En su lugar, puedes pasar a utilizar limpiadores en crema, que no contaminan tanto el aire. También puedes intentar encontrar productos de limpieza con poca fragancia, lo que suele significar que utilizan una química menos reactiva, que puede ser menos dañina.
Incluso puedes pasar a utilizar productos de limpieza más naturales, como el vinagre blanco y el bicarbonato de sodio. En ciertas superficies, pueden tener las mismas cualidades de limpieza que la lejía u otros productos de limpieza de base química, eliminando manchas, olores y suciedad. Sin embargo, siempre hay que investigar primero en qué tipo de materiales se pueden utilizar, ya que podrían dañar algunas superficies. Por ejemplo, el vinagre blanco puede usarse para limpiar las ventanas, pero no debe utilizarse en los espejos ni en los suelos de madera, ya que puede hacer que pierdan su brillo.
Leitz tiene una gama de purificadores de aire elegantes, inteligentes y eficaces para que puedas seguir respirando aire limpio en casa y en el trabajo. Trabajan para reducir los contaminantes del aire, mejorando así la calidad del aire interior y ayudándote a respirar mejor.
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